miércoles, 9 de febrero de 2011

De vuelta al camino

Cuando uno no pone atención a veces puede salirse del camino o desviarse cuando tiene una meta no lo suficientemente grande como para nunca perderla de vista. Salirse del camino a veces no es tan grave, pero a veces uno atropella sueños, personas, oportunidades y lo peor que te pasar es que termines perdido. Eso me pasó a mi, me perdí y me costó un poco encontrar el camino de regreso, el último letrero que me ayudó a llegar fue uno que decía "Bienvenido a El Territorio", un poblado en la web lleno de 1001 cosas, pueden visitarlo haciendo click en el enlace http://www.elterritorio.org/principal, ahí vive un querido amigo que me dio eso que llamamos "el último empujoncito", así en diminutivo como decimos los mexicanitos.

Y aqui estoy de vuelta, retomando uno de los oficios más viejos de la humanidad: el de textoservidora ¿pues qué estaban pensando? Tal vez no sea el más viejo de los oficios pero sí uno de los que nunca pasan de moda.

Mi ausencia en la red no quiere decir que haya dejado de escribir, sólo significa que dejé de publicar, por eso retomo este espacio subiendo viejos escritos para emparejarme y porque estamos en el mes de febrero, el primero de ellos es uno que escribí a la memoria de mi abuela quién nació un mes como éste pero de 1918...

Gracias Mortaned por la inspiración.
Gracias a quien seas tú que estás leyendo esto.
Gracias a Dios, al mío al tuyo al de todos no importa cómo lo llamemos.